8 Rasgos de un Emprendedor

8 Rasgos de un Emprendedor

¿Cómo es un emprendedor? Muchas veces tendemos a pensar que los emprendedores tienen un talento y una habilidad innatas, que son perfiles muy definidos y que de algún modo nadie puede elegir ser un emprendedor, sino que se nace o no se nace.

Lo cierto es que esta visión no es del todo correcta, ya que aunque es cierto que los emprendedores pueden tener algunos rasgos de personalidad innatos, es perfectamente posible aprender y desarrollar estas habilidades que nos ayuden a llevar a la práctica proyectos de negocio.

Para eso existen ejemplos exitosos de formación como es el caso de un Máster Online en Dirección y Administración de Empresas, también conocido como MBA Online, que ayuda a los emprendedores y potenciales emprendedores a adquirir las capacidades y características necesarias para poder dirigir y gestionar eficazmente una idea de empresa.  La Cámara de Comercio de Madrid dando respuesta a la sentida necesidad de formación en una nueva modalidad, concentra en su MBA a distancia al mejor equipo de profesores para formar a los líderes empresariales del futuro.

Comprometidos con el fomento de la vocación emprendedora, es importante destacar que muchos proyectos que actualmente son una realidad, han tenido sus orígenes en los Proyectos de Creación de Empresa que los alumnos desarrollan en grupo a lo largo del curso académico.  Es la oportunidad ideal en la que conjugan experiencias, intereses, habilidades y aspiraciones para poner en práctica los elementos y técnicas claves para gestionar un negocio en cualquier sector de actividad.

Por ello, en este artículo te mostraremos los 8 rasgos principales que creemos que todo emprendedor debe tener. Como apuntamos, son aspectos que todos tenemos de alguna forma, pero que se pueden ejercitar a través de la práctica y la formación continua para llegar a lograr mejores resultados y ser agentes de cambio e innovación en el mundo de la empresa.

Perfil y rasgos característicos de un emprendedor

A continuación, vamos a analizar 8 rasgos fundamentales que caracterizan a un emprendedor.

1. Olfato empresarial

Un emprendedor se distingue de un empresario o un trabajador por cuenta ajena en que busca nuevas oportunidades. No se conforma con el actual estado de las cosas, trata de salir de su zona de confort.

Para eso, su olfato empresarial le permite detectar posibilidades de negocio en el mercado, identificar necesidades que aún no han sido satisfechas. Tiene una visión del mercado que le ayuda a visualizar la creación de proyectos que ayuden a mejorar la sociedad con la entrega de nuevos productos o servicios y puedan convertirse en una fuente importante de ingresos.

2. Mentalidad estratégica

Un emprendedor tiene una mentalidad estratégica; aunque él mismo también puede ser el director de su empresa, uno de sus rasgos principales es que no se limita a ejecutar tareas. Tiene que diseñar estrategias y busca la forma de crear sistemas y procesos, que es la forma en que los negocios pueden ser estables, productivos y rentables de manera sostenida en el tiempo.

Esa mentalidad de estratega le lleva a planificar, prever los riesgos y debilidades de un proyecto, anticiparse a los problemas que puedan venir y buscar soluciones para la consecución de objetivos.

3. Liderazgo

El emprendedor es una persona que tiene que reunir, motivar e inspirar a los demás en torno a su idea. Da igual que sean inversores, empleados o clientes; el emprendedor debe tener una capacidad de atracción y convencimiento que vaya más allá de lo carismático y permita que muchas personas crean y confíen en su idea de negocio.

Debe ser una persona que cuente con los demás y que conozca sus necesidades. Sabe que un proyecto de negocio no puede salir adelante sólo por el esfuerzo de uno, sino por el trabajo en equipo y la acción coordinada de personas que aportan un conocimiento multidisciplinar.

Como todo líder, la asertividad es uno de sus rasgos, y tiene en cuenta que para que un proyecto de negocio funcione, debe adquirir habilidades de comunicación que le permitan lograr sus objetivos.

4. Formación continua

Si el mundo cambia, ¿por qué no intentamos también cambiar nosotros? Detrás del emprendedor, hay una persona que es consciente de que la formación continua es lo que nos permite evolucionar al mismo tiempo que la realidad del mercado.

No podemos seguir tomando decisiones antiguas ante problemas modernos. Muchas veces las empresas fracasan por falta de adaptación e innovación. Si no hay una formación avanzada y práctica en conocimientos empresariales, el emprendedor se quedará anclado en viejos proyectos que podrían no funcionar en un futuro.

El aprendizaje continuo va de la mano del emprendedor; existen formaciones de carácter empresarial que le pueden llevar a tener un conocimiento más práctico y realista del mercado. Como se citaba al inicio de este artículo, un programa MBA que en la actualidad es accesible a través de la modalidad online, se caracteriza porque trabajan los estudios de caso o situaciones simuladas de éxito y fracaso, lo que ayuda al emprendedor a tomar decisiones en entornos controlados y otros de riesgo elevado.

De un tiempo a esta parte y como resultado de una formación técnica y especializada en temas de gestión, van surgiendo perfiles de emprendedores que se enfocan en la creación de una Startup tecnológica con recursos limitados hasta llegar a convertirse en un innovador caso de éxito.

Perfil y características de un emprendedor

5. Capacidad para reconocer sus errores

 Si un emprendedor tiene una mentalidad rígida, corre el riesgo de que su negocio no funcione. De alguna manera, está actuando como un explorador, con lo que deberá tomar decisiones rápidas y entender que el método de “ensayo-error” a veces puede convertirse en su mejor aliado.

En la línea del método Lean, el emprendedor es una persona que intenta equivocarse rápido y equivocarse barato. Si una idea no funciona, no hay por qué mantenerla hasta el infinito. Existen otros enfoques que se le pueden dar a un proyecto. O se puede también crear nuevos proyectos de negocio si uno ha resultado no funcionar.

6. Capacidad crítica y analítica

 No hay un emprendedor que no tenga una capacidad crítica y lógica. El emprendedor analiza porque es la única forma de tomar decisiones con sentido. Hoy la tecnología además nos facilita mucho la tarea del análisis de datos, de manera que nuestras decisiones empresariales no estén basadas en especulaciones.

Obsesionarse con repetir acciones que no son eficaces, o no tener en cuenta todo aquello que se puede mejorar, no va con la mentalidad de un emprendedor.

7. Conocimiento del riesgo

El emprendedor no le tiene aversión al riesgo; es consciente de su realidad, pero no se ve limitado por ella. Trata de actuar sobre la base de que cuanto mejor conozcamos los riesgos, más capaces seremos de superarlos.

Tener un cierto grado de tolerancia a la incertidumbre permite al emprendedor llevar a cabo sus proyectos empresariales. La idea más arriesgada en la actualidad, sin embargo, no es emprender un negocio, sino limitarse a repetir las mismas acciones, o no realizar ninguna, y esperar buenos resultados.

8. Resolución e iniciativa

Un emprendedor trata de no caer en la “parálisis por análisis”. Los análisis, estudios y planificaciones deben traducirse en decisiones resolutivas, que permitan afrontar los problemas que surgen en un negocio.

En ese sentido, el emprendedor es una persona con iniciativa, que está dispuesta a innovar y adoptar nuevos caminos, no tiene miedo a pensar en grande (think big) y demuestra una alta creatividad y visión de futuro, al mismo tiempo que da pasos firmes y seguros.

Como habrás podido apreciar, la intención de este artículo es movilizar al lector para que se identifique con algunos de estos rasgos propios de un emprendedor que va forjando su perfil a base de prueba y error, constancia y compromiso por potenciar aptitudes y capacidades que le permitan el día de mañana ser dueño de su tiempo, de sus ideales y de planes que se ponen en acción gracias a la gestión eficaz de personas y de tu negocio propio.